Ayer sábado se celebró en el Restaurante Vandelvira de Baeza el IV Congreso del Santo Reino. Los participantes, como es bien sabido, habían acordado en el III Congreso preparar una agenda y un programa que “adelante la recuperación de la independencia del Reino de Jaén”.
Los independentistas giennenses trataron diversos temas: la fundación de una plataforma política “formal” para presentarse a las próximas elecciones municipales y autonómicas, el aprovechamiento exclusivo de las aguas del Guadalquivir, la utilización conjunta del aeropuerto de Jaén-Garnata, la cesión al emirato meridional de Alcalá la Real (“los alcalaínos son más garnatíes que giennenses”, se dijo), la creación de un cuerpo de voluntarios para dar a conocer en las ciudades y pueblos de Jaén el ideario giennensista.
Se negociará con Imarat Garnata “la cesión de un puerto” que permita la comunicación marítima. Se estudiará la cesión de la Playa de Velilla.
Por último, los giennensistas adoptaron de manera provisional una bandera del Santo Reino. Se utilizará la tradicional del Reino de Jaén, aunque eliminando la “corona borbónica”.
Se acordó que el V Congreso se celebraría en diciembre.
